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Publicado

9 de Mayo de 2006

Bueno Jalal, supongo que esta es la ultima vez que nos vemos.

Supongo. Buena suerte Michael.

Crees que la necesitare?

Jalal y yo nos sonreimos mutuamente. Siempre he sido una humilde persona; no me gusta alardear ni cuando tengo razones para ello. Recuerdo aquella primera temporada. Siete goles como siete soles en ocho partidos, que dejaban claro que no era del monton.

Aunque claro, "no ser del monton" en este pais significa que quizas, solo quizas, puedas jugar al futbol.

Todo se remonta a mis años en la universidad. Cuando llegue a la Universidad Central de Oklahoma, no tenia ni idea de que habia un club de futbol en el que poder inscribirse. Si recuerdo como el periodico universitario estaba plagado, semana si semana tambien, con articulos de dos, tres paginas, acerca del equipo de futbol femenino. Leia las paginas y se me hacia la boca agua; articulos detallados acerca de los partidos de liga de las chicas; de como las UCO Bronchos estaban en el Top 10 de equipos universitarios del pais...asi eran las cosas en este pais; el soccer femenino era mucho mas popular.

Mientras me corroia la envidia, me percate, en una de las esquinas inferiores de la zona deportiva, de un pequeño anuncio. Sin fotos, sin bonitos colores; simplemente un anuncio que rezaba, en blanco y negro:

" Apuntate al Club Internacional UCO de futbol.

Contacto: Jalal Dahfar, Director de asuntos deportivos - 555 - 5644"

La llamada no tardo en provocarse; un par de semanas y un par de papeles firmados despues, ya estaba esperando los entrenamientos de Agosto, que acabarian con el comienzo de temporada en Septiembre. Ocho partidos, los cuatro mejores equipos (de ocho) a los play-offs. El ganador estatal, a Washington para el torneo nacional.

Recuerdo que la plantilla era, como su propio nombre indicaba, internacional. Un par de nepalies, varios iranies, entre uno de los capitanes; el otro capitan era de Albania, un mediocentro con mucha clase, poca velocidad, y que recuerdo haber confundido con el español Fernando Morientes, la primera vez que le conoci. Marroquies, nigerianos, y por supuesto, nosotros, los norteamericanos. Eramos la mayoria; pero ni de lejos los mejores del equipo.

La gran parte de mis paisanos jugaban en la porteria o en la defensa; alguno que otro en el mediocentro, y un par en la delantera; aunque estos ultimos necesitaban varias clases tecnicas de como jugar arriba. Entre ellos, estaba yo; siempre jugue de delantero, y esta vez no seria diferente. Nunca he tenido demasiada tecnica, ni fuerza; mas bien era veloz, y sabiendo estar en el momento apropiado. Despues de los primeros entrenamientos, y de jugar un par de amistosos, quedo claro que Jalal, el entrenador, confiaba en mi.

Aquella temporada jugue ocho partidos, marque siete goles y acabe como maximo realizador del equip; con el capitan albanes segundo goleador. Aunque el tiraba los penalties. Nunca supe como tirar un penalty, la verdad. Pese a la buena temporada, en defensa nos cosieron a goles, y no acabamos entre los cuatro primeros.

Las siguientes dos temporadas fueron algo parecidas; yo me asente como maximo goleador del equipo temporada tras temporada, en la que perdia en velocidad, y que llegaba a los 30 años y mi tiempo para entrenar se resentia con los estudios, pero ganaba en posicionamiento, olfato de gol, y experiencia en general. Aun asi, no pudimos llegar a los play-offs hasta mi ultimo semestre como estudiante; en el que una carambola entre la Universidad de Tulsa y la de Arkansas nos dejo a nosotros como cuartos.

La semifinal fue bastante mas facil de lo que pensabamos. la Universidad de Oklahoma, la mas importante del estado, nos habia metido un 3-0 en la fase regular, que nos hacia pensar que no pasariamos de hacer una buena primera parte, y ser derrotados en la segunda. Sorprendimos a todos, incluidos nosotros mismos, cuando el 2-0 a favor en el descanso, con gol mio y de penalty del capitan, nos dejaban en ventaja para una segunda parte que seria muy dificil.

Nunca supimos llevar un resultado favorable; y como tantas veces en partidos y temporadas anteriores, nos pasamos la segunda parte atras, despejando balones, y con alguna que otra contra que pude llevar, pero que con el paso de los minutos, acabaron por dejarme muerto y con poco mas que hacer. Jalal saco a un defensa por mi alla por el minuto 75, aun con el 2-0. Aunque OU marco un gol en ese cuarto de hora restante, aguantamos, y pasamos a la final.

Entiendo que no estuve al 100% durante la temporada; entiendo que de un tiempo a esta parte, me interesaba muchisimo mas la faceta de entrenador que la de jugador, y que mis continuas ausencias en los entrenamientos por culpa de andar interesado en leer libros de entrenamientos, tacticas, y todo lo que estuviese a mi alcance, no habian ayudado al equipo...pero esto era poco menos que un golpe de gracia de la mala suerte.

Acababamos de perder contra Tulsa en la final. En el minuto 93.

Y habia sido un penalty cometido por mi.

Me dijeron que bajase a defender; que el equipo estaba muerto y solo podiamos aguantar el 0-0 hasta los penalties...a regañadientes acepte las instrucciones del entrenador, pero sin entender que podria hacer yo defensivamente en nuestra area. No sabia como defender...y eso fue bastante obvio cuando agarre a un lateral que se desbordaba en el area grande del brazo, y derribandolo, provoque el penalty.

Minuto 93. 1-0. Tulsa viajara a Washington.

Si he de admitir que todo el equipo se volco conmigo, y nunca me reprocho nada. Al menos delante de mi. O al menos, durante la hora y media en la que nos despedimos despues del partido.

Ahi estaba. Dos horas mas tarde; y con solo el entrenador y yo en las instalaciones, con la camiseta llena de barro, las manos secas, y con cara de tonto despues del partido. El final de mi carrera universitaria no fue muy feliz, que digamos.

Bueno Jalal, supongo que esta es la ultima vez que nos vemos.

Supongo. Buena suerte Michael.

Crees que la necesitare?

Despues del intento de sonrisa mutuo, Jalal musito un:

"La suerte nos habria venido bien hace un par de horas."

Ahi estaba el kit de la cuestion. Era mejor tener suerte que ser bueno? Un acontecimiento tan banal como un agarron a un lateral que se va de ti en el mintuo 93 de un partido acaba con derrota; de no haber caido habriamos estado en Washington para el torneo nacional. Y de haber sido asi, con toda seguridad que no me habria ido del pais tan rapidamente; ya que todos los equipos que llegan a los nacionales son ojeados por equipos de la Major League Soccer; algunos incluso pudiendo fichar por sus filiales, o por equipos de la USL.

La suerte y el azar lo dominan todo. De haber evitado ese agarron en el minuto 93, seguramente muchas cosas habrian sido diferentes en mi vida.

veremos como sigue, esperemos que como tecnico sea mejor que como jugador y asi no depender de la suerte

Espero que Michael tenga la suficiente suerte para sacar adelante su carrera en el mundo del fútbol luego de esa derrota en el minuto 93, a pesar de que siempre fue la figura con el capitán albanés.

Suerte, Cristian.

  • Autor

Gracias a ambos por el apoyo desde el principio, espero veros por aqui.

He aqui una historia que sera de lectura obligada. Y digo "obligada", porque sera eso; lectura. Este sera el diario de Michael Westen y de su carrera futbolistica; la cual sera 100% sacada de la memoria del entrenador. Ya que esta es una carrera sacada de la memoria de un personaje al que ireis conociendo, habra poco mas que clasificaciones que el entrenador pudiese sacar de internet en bases de datos historicas, y pocos mas datos de interes, y no habra ningun "screen" de por si. Sin mas, os dejo con Michael Westen y la introduccion a la que sera una novela que, tanto autor como lector, deberan seguir asiduamente si no quieren descolgarse de ella.

Saludos a todos.

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23 de Junio de 2006

El plan siempre habia sido ir a Inglaterra.

Inglaterra siempre fue un pais acogedor para jugadores norteamericanos en cuestion de futbol, sobretodo de un tiempo a esta parte.Como buen seguidor de los jugadores de mi seleccion, el Fulham era uno de mis equipos preferidos. Durante el verano en el que planeaba viajar a Inglaterra, hasta tres jugadores norteamericanos jugaban en el Fulham: Carlos Bocanegra, Clint Dempsey, y Brian McBride.

El primero, uno de los mejores centrales de la historia del pais, y que llevaba tres temporadas siendo titular con el equipo ingles; el segundo, un novato recien fichado desde New England, y que tenia muchas miradas puestas en el; y el tercero, el guerrero del area; el delantero que comenzo su verdadera aventura europea a los 30, y que aun asi tuvo tiempo de jugar 85 partidos con la elastica blanca en tres temporadas. Este ultimo, uno de mis idolos, fue razon suficiente para hacer del Fulham mi equipo europeo preferido desde que ficho por ellos.

El plan, como digo, era llegar a Inglaterra. Ante la pobre situacion economica en la que me encontraba, y aun a expensas de vender la casa en Oklahoma City, el itinerario daba bastante miedo:

Oklahoma City, OK - Houston, TX

Houston, TX - Chicago, IL

Chicago, IL - Zurich, SWI

Zurich, SWI - Londres

El total de horas entre mi salida de Oklahoma City y mi llegada a Londres era, exactamente, 21:37. De esas 19:37 horas, estaria mas de 14 en el aire.

Ni que decir cabe que, para cuando llegue a Zurich, ya estaba hecho trizas. Sin ganas de comer, es mas, con dolor de estomago por culpa de dos raciones de dudosa calidad en el vuelo que atravesaba el oceano. Me mire en el espejo del aereopuerto suizo, y vi a una persona que acababa de pasar por un infierno. Las ojeras me llegaban hasta las mejillas, y en ese momento, habria pagado diez veces mas de lo normal por tener una cama a mi alcance.

A los pocos minutos de sentarme en un restaurante de la terminal, la pantalla de vuelos pendientes cambio durante un segundo. El parpadeo que provoco el cambio llamo mi atencion, centrada en un boletin de noticias en la television, en el que se hablaba en aleman; un aleman que apenas lograba vislumbrar gracias a mi cursillo intensivo de dos semanas hacia unos...ocho años.

Segun parecia, el vuelo de Zurich a Londres estaba cancelado.

Que es peor que volar durante mas de 20 horas? Volar durante mas de 16 horas, y justo antes del ultimo vuelo, de cosa de hora y media de duracion, tener que pasar la noche en el aereopuerto.

Noche que, por falta de recursos economicos, pase en el aereopuerto.

A las tres de la mañana, todo el sueño que tenia se habia disipado. Despues de dos horas y media de siesta, no podia estar mas despierto, y me quedaban otras nueve y media antes de cojer el avion hacia Londres. Me lei todos los panfletos de la terminal; incluso le robe el periodico a un pobre hombre que dormia en un rincon de una de las sub-terminales. No me sentia orgulloso de ello, pero despues de mas de treinta horas sin salir de un avion o aereropuerto, me sentia como en la jungla.

A eso de las cinco de la mañana, justo cuando empezaba a perder el juicio, una voz potente me saco de mi estado de insomnio y jaqueca asesina.

" Le dije que no volviese a casa! Se lo dije. Bueno...gracias. Adios."

Editado por Cristian_Villarreal

Hi, my name is Michael Western, I used to be spy until-

You're burn.

When you are burn, you have nothing. No cash, no credit.....

Y podría seguir. Me sé esa introducción de ''Burn Notice'' de cabo a rabo ¬¬

En fin, parece muy interesante esta historia, y encima con todas esas restricciones que pusiste en la zona de discusión de historias, así que te iré siguiendo, tenlo claro. Me gusta que vaya a ser tan realista, yo nunca podría hacer eso.

Un saludo.

Bueno, me esta empezando a gustar la historia, pero tengo ganas ya de ¡futbol! Veremos a ver lo que pasa despues de la terminal, y que hace Michael...

¡Suerte, Te sigo!

Hombreeeee si es el de la ciudad vecina xD

¿Cómo va todo?

Bueno ahora sí, centrándome en la historia. He leído todas las restricciones que te has puesto y me parece un gran reto, así que ten por seguro que te sigo. Veremos como le va al mánager yankie por tierras suizas..

El prólogo muy bueno, eso sí, como dice Pio², queremos ver algo de fútbol. Mucha suerte!

  • Autor

Pio, Burn Notice es una de mis series favoritas, me alegro de que alguien me entienda. Muchas gracias por el apoyo a los demas, espero que os siga gustando.

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23 de Junio de 2009

No recuerdo exactamente como se desarrollo esa conversacion. Este sesenton de pelo aun semi-negro y con cara de viejo afable estaba pasando por un momento poco menos que estresante.

El desayuno que compartimos en la cafeteria de la terminal dejo clara la situacion: segun parecia, el vigente entrenador del equipo de futbol para el que aquel señor trabajaba habia vuelto al pais donde su familia vivia, Italia. Un tema de mafias, pense. Casi al mismo tiempo, me auto regañe por achacar un problema que acababa de oir a un estereotipo de varias decadas atras.

"Nunca es buena señal si tu familia es parte de la mafia; y asi le fue a Don Ponte" murmuro el viejo. Por una vez desde el inicio de la conversacion, ambos estabamos de acuerdo. Me llamo la atencion el haber hablado del entrenador en tiempo pasado.

El abuelo siguio hablando medio solo, medio hacia mi.

" No importa cuan duro uno trabaje. Si no tienes suerte, no iras a ningun lado. Mirame a mi. He trabajado duro toda mi vida para conseguir estar involucrado con el futbol; y mañana mismo puede que me despidan, cuando vuelva a las oficinas sin entrenador y sin nada que ofrecer como alternativa. Como ultima opcion tenia pensado viajar a Sicilia e intentar traer a Don Ponte de vuelta... "

"...Y?"

"Don Ponte fue asesinado ayer noche en su casa. Junto a su madre, su hermano mayor, y su hermana pequeña y su marido. Todos."

Al mismo tiempo que me sentia algo mal por la perdida de Don Ponte y su familia, y por la mirada perdida del misterioso abuelo enfrente mia, lo unico que podia pensar era en la mejor forma de ofrecerle mis servicios para entrenar al club en el que este hombre trabajaba.

Tampoco es que conociera a Ponte en cuestion

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"...Pero como me voy a presentar contigo en las oficinas? ...Quien eres tu?"

Mi curriculum salio de mi boca como si me fuera la vida en ello.

La version embellezida, claro.

"Mi nombre es Michael Westen. Soy nortamericano, y tengo 30 años. Tengo la licencia A de la UEFA para entrenar, y he estudiado muchos años para prepararme para ello. De hecho, esa es la razon por la que estoy aqui. Mi idea era la de ir a Londres e intentar encontrar trabajo."

El abuelo se mostraba dubitativo, por decir poco.

"...No, no lo veo. Si me planto aqui con un entrenador de 30 años sin experiencia, y ademas, norteamericano...me daran el finiquito...o ni eso."

Si hay algo que recuerdo de esa conversacion, fueron estos minutos. Estaba intentando convencer a este desconocido de que era la mejor opcion para entrenar a su equipo, cualquiera que fuese; pero sin parecer desesperado.

"Cuales son las posibilidades de que usted haya descubierto que Don Ponte murio en Sicilia hace unas horas, y de encontrarme a mi al colgar el telefono, un entrenador buscando trabajo?"

"Michael...no lo se. Mira, te deseo lo mejor, pero no creo que sea una opcion valida. Lo siento."

El abuelo se incorporo de su asiento, se arreglo el abrigo de lana largo que llevaba, me lanzo una mirada furtiva antes de darse la vuelta, mezcla de pena y compañerismo, y comenzo a andar en direccion opuesta hacia mi.

No sabia que hacer.

Debia parar a ese hombre.

"Se que puedo ser el mejor. Se que puedo hacerlo, y si trabajo duro y me dan una oportunidad, lo hare. Ahora solo necesito una oportunidad."

El abuelo se paro. Se dio la vuelta, y cuando esperaba a oir una carcajada por su parte, o si acaso una mirada de incredulidad; pero el se limito a, lentamente, caminar hacia mi. Me miro a los ojos durante unos treinta segundos que parecieron eternos, y despues de la pausa mas grande de mi vida, al fin hablo.

" Que demonios...Ignaz Good. Encantado de conocerte, Michael."

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23 de Junio de 2006

"Este tio me va a arrancar la cabeza de cuajo."

Su silueta se veia proyectada gracias a la luz de la ventana. Estaba de pie al lado de ella, de espaldas a Ignaz y a mi. Aunque Ignaz le llamo un par de veces, el no se dio la vuelta hasta pasados unos cuantos segundos.

"Don Vecchie...Don Vecchie, ya hemos llegado..."

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"Taxi, Taxi!!!"

Finalmente encontramos uno que tuviese la amabilidad de dejarnos entrar, y al mismo tiempo que pensaba que me habia metido en un embrollo del quince, ademas de ya haber perdido el avion a Londres, Ignaz seguia hablando.

"Si queremos que esto funcione, tu quieres conseguir el puesto y yo quiero salvar mi cabeza, vamos a tener que embellecer tu curriculum."

"Pues no se que podriamos hacer, la verdad. No es que haya muchos equipos para entrenar en EStados Unidos; al menos que valgan la pena..."

"Podriamos decir que has sido segundo entrenador de un equipo de la USL durante cinco años. Podria funcionar, no?"

"Si, podria funcionar. Los Minnesota Thunder son uno de los peores equipos de la USL; y el que menos prensa tiene."

"Perfecto, pues diremos eso. Hablale de los estudios de entrenador que tienes, y por el amor de Dios, no le digas que solo ves la Major League Soccer y la Premier League,"

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"Ignaz, esto no es lo que acordamos."

"Lo se, Don Vecchie. Don Ponte ha sido asesinado ayer noche por la mafia de Sicilia, donde su familia residia. Su familia tambien ha sido asesinada."

Don Vecchie solto un pequeño suspiro, de apenas segundo y medio, para despues murmurar un "vaya por dios", y seguir con la conversacion.

"O sea, que te referias a eso cuando me dijistes que Raimondo no volveria aqui. Bueno, pues entonces sera mejor que te pongas a buscar a un substituto, cuanto antes."

"Don Vecchie, creo que Michael podria hacerlo bien al cargo del equipo. Como ya le dije por telefono de camino aqui, Michael ha sido segundo entrenador en..."

"...Dejame que me ocupe yo de juzgar eso. Eso es todo, Ignaz."

Ignaz salio de la oficina en algo asi como dos centesimas de segundo. No se lo reproche; segun parecia, su trabajo seguia estable, al menos de momento. Mientras yo seguia ahi, de pie, al lado de la puerta cerrada, y con mil pensamientos pasandome por la cabeza, Don Vecchie se situo detras de su mesa, puso los nudillos en ella, y mirandome fijamente con la cabeza gacha, comenzo a preguntar como si de un fusilamiento se tratase.

"Has entrenado antes?"

"Pues vera, yo--"

"No, no has entrenado. Se que has pasado de estudiante de universidad a...aqui."

Mi mirada perpleja, que paso a ser una mirada de cordero degollado, lo dejaba todo claro.

"Quien te crees que soy? Crees que podeis mentirme asi como asi? Ignaz lleva mucho tiempo aqui, deberia de conocerme mejor. Cinco minutos despues de decirme lo de Minnesotta, ya habia encontrado la verdad sobre ti."

En ese momento, ya no habia nada que decir.

"Segun parece, tenias un avion para Londres."

Monosilabas era todo lo que la verguenza propia me dejaba articular.

"Si."

"Para que vas a Inglaterra?"

"Quiero buscarme un trabajo como entrenador."

"Te gusta la Premier, uh?"

"N-No...me gusta mas la liga española."

"Dime el nombre de cinco equipos de la liga española."

De nuevo, varios segundos pasaron, sin que yo pudiese articular palabra.

Habia metido la pata.

Otra vez.

"Mira, Michael. Asi no vas a ir a ningun lado. Esto no es una pelicula; no puedes mentir y salirte con la tuya, y esperar que esta situacion sea nada mas que una anecdota cuando ganes la Champions League. Estas en una nube. Eres un crio, y estas en una nube. Si todos los crios como tu acabasen triunfando, tendriamos que jugar mil Champions Leagues cada temporada. Ahora mismo, no eres nadie, y seguramente, nunca lo seas."

El nudo en la garganta ya era mas una soga al cuello.

"Dicho esto..."

Mis ojos reencontraron los de Don Vecchie de nuevo, tras cinco minutos de mirar al suelo.

"Dicho esto, analicemos la situacion. Tienes agallas; eso esta claro. Y segun parece, Raimondo no volvera por aqui. Te voy a dejar claro como estan las cosas. Vas a hacerte cargo del equjipo hasta que encontremos a un substituto para ti. Con suerte, podras entrenar durante un par de semanas."

No me podia creer que podia acabar entrenando a este equipo, si acaso por unos dias.

"Ni que decir tiene que no podras hacer ningun fichaje o venta, no ser que el Director deportivo lo apruebe. El director deportivo es Ignaz. Te pagare el salario base de Raimondo, 325 euros a la semana. Eso deberia de hacerse cargo de pagarte el billete a Londres una vez no hagas falta por aqui. Ignaz te presentara al cuerpo tecnico y te pasara el informe de los jugadores. Mas te vale leertelo pronto, tienes entrenamiento esta tarde. Manda pasar a Ignaz."

A pesar de no haber dormido decentemente en cuarenta horas, me puse tan firme como pude, y asenti a todo lo que el presidente dijo. Cuando su mirada se convirtio en un "porque sigues aqui?", me di media vuelta, y abri la puerta con intencion de irme. En el pasillo, Ignaz esperaba como un flan el desarrollo de los acontecimientos.

"Una cosa mas, Michael."

"Si me mientes una vez mas, una sola, estas despedido."

Asenti, cerre la puerta tras de mi, no sin antes echar un vistazo a un cuadro que no habia visto en todo ese tiempo en la oficina. Justo al lado de la puerta, el escudo de lo que parecia ser el club estaba estampado en el, y debajo, el nombre del equipo que, segun parecia, acabaria entrenando.

"YF JUVENTUS".

Editado por Cristian_Villarreal

Guau! Gran capitulo si señor, ya empiezan a "cuadrar" las cosas =D. Vamos a ver lo que pasa por la tarde....

  • Autor

Vastric, segun parece van a ser un par de dias muy agitados para Michael. Un saludo.

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24 de Junio de 2006

Rogue al bueno de Ignaz que me diese un par de horas para pegarme una ducha, comer algo, y centrar mis ideas en todo lo que se venia. El abuelo me dirigio a las duchas de las instalaciones para juveniles, que segun vi, son de lo mas avanzadas. Sin duda que esto vendria bien a la hora de hacer que los canteranos del club creciesen futbolisticamente, y se mantuviesen centrados en mejorar, y privilegiados de poder formar parte del club.

Al salir de las instalaciones, despues de la ducha y llevando el chandal del club que Ignaz me habia dado, pude ver como, dos calles mas abajo, cuatro postes de luz sobresalian de los edificios cercanos. Pensando que ese seria el estadio, me imagine como seria entrar en el, con todo el mundo sabiendo que eres el entrenador; con todos sabiendo que eres el jefe. Una de las sensaciones que he intentado simular desde que comence a soñar con este trabajo fue el que tu equipo marque un gol, o gane un partido. Siendo como siempre he sido una persona inquieta y que hace las cosas por si solo, la frustracion de ver como tu equipo no puede marcar un gol por mucho que lo intenta, cuando no es un buen dia en el campo, puede ser igual de intensa que ver un gol a favor en el marcador del equipo que uno entrena.

Ignaz me bajo de las nubes con un grito desde la otra parte de la calle. "Vamos Michael", grito. "Nos espera el cuerpo tecnico."

Uno de los edificios cercanos al estadio e instalaciones deportivas era de lo mas "chic", construido a base de bloques blancos como el marfil, y con una banda negra en la zona baja del mismo, coloreada del mismo tipo que los colores del escudo. Moderno, sofisticado; "nuevo", como uno esperaria de un club suizo creado en los noventa. Despues de pasar un par de salas,una vez en el edificio, llegamos a una con cristales por paredes internas, y un grupo de personas alrededor de una mesa ovalada. Justo antes de que ellos notaran nuestra presencia, podia ver como todos, absolutamente todos, hablaban entre si, murmullando pero de forma vigorosa.

Ni que decir cabe de lo que estaban hablando; no tenian ni idea de lo que estaba pasando en el club.

Ignaz no se ando por las ramas a la hora de aclarar la situacion, una vez hicimos acto de presencia en la sala.

"Veamos chicos, este es Michael Westen. Es un norteamericano recien llegado desde Oklahoma, y se va a hacer cargo del primer equipo hasta que encontremos a un sustituto para Don Ponte. Os pido que os subais al carro cuanto antes, hagamos las presentaciones, y comencemos a trabajar de cara a la pretemporada. Tenemos cuatro partidos en casa durante los proximos veinte dias, y no es cuestion de andarse por las ramas."

Los cuatro preparadores, que habian estando conversando acerca de como tenian que irse a preparar el entrenamiento de la tarde, despues de presentarse, se marcharon. Si bien todos los empleados eran suizos, algunos tenian sangre italiana, a juzgar por sus rasgos. Charles, Philip, Giorgio y Piero, siendo Philip el jefe de preparadores (supongo que sus mas de cuarenta años de edad eran una ventaja frente a los treinta y tantos de los otros tres.) A los pocos minutos de conocerme, se marcharon junto con el fisio Karl Ruhe, el entrenador de porteros, Rene Morfedi, y el preparador de los juveniles, Walter Spani.

El ojeador Luigi Riccio no hizo mas que murmurar acerca de que iba a pasar con todos los informes que habia realizado para Don Ponte; a lo cual Ignaz le respondio con un escueto "en un par de semanas se alcarara todo, tomate unos dias de relax. Has hecho un buen trabajo este verano"

El segundo entrenador se presento como Raffaele Novelli; un suizo que, segun el mismo tenia familia en Luxemburgo. Supuse que me estaba contando algo de su vida para intentar estrechar el cerco y avanzar la relacion entre los dos, a lo cual respondi con otro dato personal: "tengo raices nortaemericanas y españolas." Despues de un par de minutos de charla amena, Ignaz corto el rollo, y hablo claro: "Mirad; el presidente quiere que os hagais cargo del club durante las proximas semanas, hasta que se aclare la situacion y quien es contratado como entrenador."

Ignaz no se corto a la hora de decir lo que pensaba; "esta claro que no le va a dar las riendas del club a un entrenador que ni el mismo conoce. Ahora bien, creo que por el bien de vosotros dos, y por el mio, deberiamos de intentar que esto funcione desde el principio. Si hay un buen ambiente en el equipo, y comenzamos la pretemporada con una actitud positiva, puede que cambiemos el parecer del presidente. Ahora mismo, hay que intentar hacerse con la situacion del equipo, cuanto antes."

Raffa y yo asentimos sin musitar, y a los pocos segundos, Ignaz ya tenia el plan pensado: "yo tengo que irme a arreglar todo el papeleo para tenerte como primer entrenador desde ya. Id a mi oficina, y repasad el informe del primer equipo. Despues de eso, id a las instalaciones deportivas, y ahi te presentas ante los jugadores, Michael. Nos vemos en unas horas."

Basicamente estaba solo, desde ya. Raffa me hecho una mirada complice, lo cual me dio algo mas de seguridad. Como Ignaz bien habia dicho, los tres teniamos mas posibilidades de seguir en el club si trabajabamos juntos. Y eso era algo que jugaria a mi favor.

Editado por Cristian_Villarreal

  • Autor

24 de Junio de 2009

"Y entonces...no tienes experiencia...de ningun tipo?"

Si el presidente me habia dado el mando del equipo, aunque fuese para los partidos de pretemporada, sin tener experiencia ninguna...pues no veia razon para mentirle al segundo entrenador. Intente ponerlo cuanto mas penoso mejor, para ganarme su simpatia e intentar que me echase una mano. Detras de cada entrenador, hay un segundo de a bordo soñando con tu puesto...

"No, no he entrenado, ni he sido parte de ningun cuerpo tecnico. Es mas, me saque la licencia A de entrenador hace unos meses."

Raffa me echo una mirada furtiva mientras que conducia. No esperaba que yo estuviese mirandole a el, pero asi era; cace su mirada de incredulidad. Supongo que eso le hizo sentirse mal, mas que nada por lo que salio de su boca a los pocos segundos. Raffa intento cambiar de tercio e informarme acerca del club.

"El Young Fellows Juventus es un club que salio de la fusion de dos clubes, alla por 1992; el Young Fellows Zurich, y el Societa Calcistica Italiana Juventus Zurigo, si no recuerdo mal. Esta temporada es la primera vez que ascendemos a la Challenge League, o la segunda division del pais. Esta claro que nos dan por descendidos, pero hemos estado preparando la temporada durante todo el verano. Te sorprenderias de ver las palizas fisicas que se ha pegado el equipo durant el ultimo mes y medio!"

Mientras me debatie entre decidir si palizones fisicos antes de pretemporada era algo bueno o malo, llegamos a las instalaciones deportivas, donde algo mas de veinte jugadores haciam carrera continua. Segun parecia, habian comenzado a calentar hacia unos minutos. Unos cien metros al lado, otro campo de futbol acogia a unos veinte jugadores, haciendo toques de balon en parejas. Por sus caras parecian quinceañeros, lo que me llevo a deducir que era el equipo juvenil. Segun parecia, el club trataba lo mejor posible a su cantera.

" Tenemos unas muy buenas instalaciones de juveniles; y nuestra escuela de formacion tambien es algo de lo que alardear. Siendo como es este club de los menos adinerados de las primeras dos divisiones, es vital encontrar ayuda para el primer equipo en los chavales."

Si hay algo que siempre he respetado era a los entrenadores que tenian la sangre fria de colocar a un canterano en el primer equipo, y hacerle superarse a si mismo y meterse entre los once titulares. Segun percibi, la cantera era parte importante del proyecto de este club.

" Te comento tambien que tenemos cuatro partidos esta temporada, y que el primero es mañana mismo. Los jugadores que tenemos son todos a tiempo parcial; intentamos entrenar por la tarde para compaginar el equipo con los trabajos de los jugadores. Poco mas se puede hacer que intentar lidiar con problemas como este, aunque estemos en segunda division." Ah, el primer partido es mañana; el Rhodienne de la tercerca division belga esta haciendo un mini stage por Suiza, y hemos acordado el partido hace varias semanas ya."

Al oir lo del "partido de mañana", mi cara expreso un gesto de disgusto que Raffa vio claramente. "Una cosa tras otra, Michael. Vayamos paso a paso. Introducete a los jugadores, veamos el entrenamiento, vete a descansar durante el resto del dia, y mañana nos reuniremos temprano para elegir el once y la tactica con la que jugaremos.El partido es a las cuatro de la tarde; tenemos tiempo de sobra para prepararlo, y es un amistoso despues de todo. Si quieres podemos incluso utilizar la tactica que Don Ponte ha ido practicando, y desde ahi haces tus ajustes."

Asenti casi roboticamente, y justo antes de llegar a perder la cabeza con tantas cosas en las que pensar, el coche llego a donde se situaba el campo de entrenamiento.

Raffa paro el coche en el parking justo al lado del campo, y la mayoria de jugadores, que entonces pasaban corriendo, giraron la cabeza hacia nosotros, curiosos de ver quien era el nuevo entrenador.

"Michael, quieres que hable yo, o quieres comenzar por tu propio pie?"

Habia estado pensando en esa misma cuestion desde hacia varios minutos. Fuera por la razon que fuera, o durante el tiempo que fuera, era el entrenador del primer equipo, a todas luces. Despues de pensarlo durante unos segundos mas, decidi que, si era el entrenador, aunque fuese provisionalmente, debia de actuar como tal.

"Llamales a la banda, y me presentare. Espero que no se comente nada acerca de mi mas que posible marcha en un par de semanas; no quiero que los jugadores me ignoren al saber que no voy a estar aqui mucho tiempo." Raffa asintio de una manera que me hizo ver que todo eso ya habia sido decidido por el presidente.

El grito de Raffa nada mas salir del coche me asusto hasta a mi, pero intente parecer lo mas sereno posible. Percibi que mis manos estaban cubiertas de un sudor frio, y como tantas veces en clase de discurso publico, note como mi garganta se cerraba. Una vez jugadores y empleados se reunieron en la banda derecha del campo, todos alrededor de mi y casi alineados en la cal, supuse que era mi turno para presentarme.

"Buenos dias, caballeros. Mi nombre es Michael Westen; no tengo mucha idea de aleman, por lo que sera mejor que hable en ingles." La mayoria de jugadores aun estaban examinandome fisicamente, como para escuchar lo que estaba diciendo. Me di cuenta de que un par de jugadores incluso parecian mas viejos que yo.

"Supongo que ya todos sabeis acerca de lo que le ha ocurrido a Don Ponte. Me gustaria deciros que tenemos un tiempo para hablar del tema, pero no lo tenemos. Mañana tenemos un partido, el primero del verano, y ante nuestra aficion. Vamos a tener que ajustar el equipo a medida que pase la pretemporada, pero cosas peores hemos pasado todos. Os pido que intenteis cooperar lo maximo posible para que todos juntos nos reorganizemos y empecemos a planear la temporada en segunda division."

Con algunas miradas aun incredulas, me senti tentado a seguir hablando; "Si ya estamos todos y estamos listos para el entrenamiento de hoy, entrenemos de forma suave y a descansar antes del partido de mañana. Estoy seguro de que muchos de vosotros ya estais hartos de mi acento norteamericano, asi que mejor que nos pongamos a trabajar."

El par de sonrisas que mi comentario arranco era lo que necesitaba para aliviar la tension en el grupo, e incluso la mia. El segundo entrenador comando en aleman a los jugadores, y todos volvieron al centro del campo, mientras que los preparadores organizaban uno de los ejercicios en el centro del campo con conos.

Durante la siguiente media hora de entrenamientos, intente empaparme todo lo que pude de quien era quien y como estaban de forma; pero no pude hacer gran cosa. Treinta minutos mas tarde, el segundo entrenador paro el entrenamiento, y los mando a las duchas. Cuando le pregunte el porque de un entrenamiento tan corto, Raffa fue sincero: "desde que Don Ponte desaparecio hace ocho dias, hemos entrenado mucho mas fisicamente de lo normal. Estare agradecido si nadie se lesiona mañana, si te digo la verdad. Estan muy cansados fisicamente."

"Esa no es la forma mas optima de comenzar una pretemporada, Raffa..."

"Lo se, y la culpa es mia. No he sabido llevar las riendas mientras Don Ponte se fue."

En se momento, entendi que este equipo necesitaba un entrenador, y lo necesitaba cuanto antes. Lo que no sabia era si estaria a la altura de la situacion. Raffa se despidio despues de hablar con uno de los preparadores, y mientras caminaba de vuelta al coche, me dijo unas ultimas palabras.

"Vete y descansa, mañana sera un dia largo", dijo por encima del hombro. Ignaz te llevara a tu casa; tiene una casa rural con varias habitaciones a las afueras de la ciudad; te quedaras ahi hasta que...bueno, hasta que pase lo que tenga que pasar en un par de semanas. Nos vemos mañana."

Con cara de fantasma y movimientos de zombie, me dirigi al coche de Ignaz, que habia estado silenciosamente siguiendo el final del entrenamiento desde el corner, y agradeci al cielo poder comer algo e irme a dormir. No habia pegado ojo en mas de dos dias.

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