Carta a los Lectores


Sean bienvenidos a mi nueva historia, Infierno es Rojo.

Algunos ya me conocen de los últimos años, otros quizás ni me recuerden, o no vivieron mis historias anteriores. Como pocos ya saben, los estudios principalmente han logrado separarme de esta sección e incluso del foro en general, durante los últimos cinco meses. Lejos queda aquellos grandes momentos con el Peña Sport y el Ascenso a Segunda en 2011(), o las aventuras de Leson Seltaeb en aquel Liverpool dirigido por PaulMcCartney(). La primera historia fue el punto de inflexión para mi, tanto como historiador como jugador. Sin embargo, Twist And Shout fue para mi el proyecto más interesante, divertido y emocionante hasta la fecha. Mi objetivo es retomar la idea de aquel Liverpool y volver a ponerlo en marcha, pero aún queda mucho para eso. Tras mis primeros pasos en Inglaterra, hice un pequeño intento en Un Serbio en Hoffenheim() que fue más un aborto que una historia hecha y derecha, dos páginas y un intento de repetir lo vivido con mi querido Peña Sport(apunto de descender este año a Tercera División) .
Mi último paso fue otra vez en Inglaterra, con un histórico como el Sheffield Wednesday, que acabo con el mismo final que las dos últimas, a causa de un problema con el juego().

¿Porque esta vez va a ser diferente? Agarro con emoción este nuevo Football Manager 2014, y con el equipo de mis amores, el único equipo que me ha hecho llorar, de tristeza y alegría, de emoción y rabia. Las mujeres dicen que el fútbol nos vuelve locos, y Osasuna ha logrado que sea el más loco de este manicomio. No piensen en esta historia como la típica, algo de trama, bonitos gráficos y texto trabajado. Si desea eso, hay muchos así por todo el subforo.
Yo propongo otra cosa diferente.
Esta historia estará escrita con el corazón en mano, cada letra tendrá más sentimiento que la otra, y pretenderé haceros ver lo que realmente se siente cuando amas un equipo tanto como yo.

"Si no estas en los malos momentos, no lo estés tampoco en los buenos."

Tengo 15 años recién cumplidos, lo que conlleva una vida social plena y unos estudios que sacarme, no puedo prometer un post cada día, pero si esfuerzo en cada párrafo. Cada gráfico tendrá sus horas detrás, como cada texto, sean respuestas o crónicas. Esta historia, será acompañada de una trama de las que tanto me gustan, y que hará que veáis que al fin de cuentas, un conjunto no se basa solo en el entrenador. No será la típica historia, os advierto, pero solo puedo rezar para que os agrade.

Finalmente, quisiera lanzar un último mensaje de agradecimiento aquellas personas que siempre me apoyaron, destacando dos personas en especial, la primera mi amigo Andrés (Andy10 ) que pese llevar tiempo sin hablar con él, sabe que en el otro lado del charco tiene un amigo, y que pese nuestras diferencias en algún momento, los momentos buenos perduran sobre los malos.
El otro agradecimiento es para mi buen amigo Gerardo (Xopi) al que le debo también mucho. Siempre ha estado en cada esquina para apoyarme, pese los malos momentos, y confio que juntos, tanto su Elche como mi Osasuna se mantengan un año más en la máxima categoría del futbol.

Así pues, aquí teneis mi nueva historia, que espero, llegue a buen puerto.

Beovide

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Editado Abril 20, 201411 años por Beovide

''Wake Up Baby''El calor del esperado verano despertó a Iglesias antes de lo previsto, eran las siete de la madrugada, y el trabajo no comenzaba hasta llegadas las diez de la mañana, no era el horario habitual, ni mucho menos, pero frente a él se presentaba el día marcado en todos sus calendarios, el que esperaba como agua de mayo, el último día de trabajo.
La alta temperatura no fue lo único que ayudó a que el sueño desapareciera tan pronto, aquel día se presentaba clave, y Felipe siempre se había mostrado muy nervioso para estos temas. Porque pese dejar el club hasta principios de Julio, casi dos meses de vacaciones, todo su futuro dependía de las próximas horas en Tajonar.
Se levantó sin dificultades de la cama que ocupaba y se preparó un pequeño desayuno, algo que supiera que, pese los nervios que le comían por dentro, pudiera retener. Frente las dos tostadas cubiertas de mermelada, se encontraba el periódico de hoy y un papel mal cortado que supuso que debía de ser una nota. <<Juani.-Pensó para sus adentros.-Habrá salido a comprar pan caliente.>> Y como había previsto, la veterana criada había comprado el periódico como cada mañana, para luego salir a buscar el pan para el desayuno, un habito más en la que podía llamar su amiga. Ella, a sus pasados cincuenta años, era la voz madura que necesitaba Felipe a sus 25 , y pese ser para cualquiera una criada que le limpiaba la casa y cobraba por ello, para él ya era parte de la familia.

-¿Acaso no puedes dormir? No me dijiste que hoy no entrabas hasta las diez?-Dijo ella, al entrar por la puerta, con la barra de pan bajo el brazo.
-Hoy es un día difícil, y lo sabes. Hasta la prensa se ha hecho eco de lo que sucede.-Dijo, señalando el periódico que minutos antes Juani le había traído.-Sale en portada.
-Pero esto es el periódico local, seguramente fuera de Navarra de lo único que se hablará será de lo de siempre, Barça y Madrid.-Se quejó ella. No era seguidora del deporte rey, eso lo sabía Iglesias desde que la contrató, pero con el tiempo que había pasaba a su lado, había experimentado un odio hacía aquellos equipos que dominaban el fútbol español.-Solo los humildes sabemos de fútbol.
-¿Sabemos? No sabía que ahora eras fan de algún equipo-Dijo entre risas.-Además, tu y el fútbol…
-Ya sabes que con el tiempo he cogido cariño a tu Osasuna, y aunque no pienso tragarme un partido entero, yo maldigo a quien haga falta para que ganéis.
Además, si no lo hacéis, ¿Quién me asegura a mí que no te van a echar? ¡En cada puto partido me juego mi sueldo!
-Pues hoy tenemos el partido más importante de nuestras vidas. Yo de ti comenzaría a rezar…

''The Time'' Cuando el reloj marcó la hora esperada, Felipe se bajó de la bicicleta y la dejó aparcada cerca del campo de entrenamiento. El trayecto desde su pequeña casa, centrada en la mismísima Pamplona, a Tajonar era corto, menos de veinte minutos en bicicleta, pero eso era solo a mediados de semana, cuando nadie se paraba a pensar en el conjunto local. Los días de partido era una locura pasar por en medio de la ciudad, la gente te paraba para pedir autógrafos de los jugadores o para dar sus ánimos al equipo; y peor era cuando se perdía, entonces era mejor no pasearte por la ciudad, o te arriesgabas a una paliza de algún forofo, enfadado por la mala imagen del equipo. Para su suerte, en sus tres años en el club, nunca había recibido ni un puñetazo, gracias a los consejos que le habían dado, y que tampoco le importaba dar un pequeño rodeo para llegar a Tajonar. Viendo la tensión que desprendía las calles de la capital Navarra, causada por el posible cambio de entrenador, no se había arriesgado a pasearse por la ciudad, y había decidido dar un buen rodeo con la bicicleta, llegando justo a tiempo para la reunión.


Al entrar por las puertas azul óxido, visualizó la gran escultura del escudo que se presentaba imponente detrás de la portería derecha; había sido lo primero en lo que se fijó cuando piso los terrenos por primera vez, y desde entonces, no había dejado de impresionarse con el escudo Osasunista esculpido en piedra. Dejo los recuerdos de su niñez, para ponerse pensar en lo que podía ocurrir aquel día. En la pequeña gradería podía contar con una mano la gente que había asistido a ver el entrenamiento, un niño de unos cinco años, un abuelo y dos jóvenes que debían de tener la misma edad que Felipe. En la verde hierba los jugadores acababan de comenzar a dar unas cuantas vueltas, dirigidos por Alfredo, el segundo entrenador. En sus caras se reflejaba las ganas e ilusión que provocaba las vacaciones, todo lo contrario en la de la mano derecha de Mendilibar, que veía que su ciclo en Osasuna estaba a punto de finalizar.
En la entrada a los vestuarios, cuatro hombres con traje y otros dos con chándal discutían en voz baja, al principio, Iglesias no supo distinguir de quienes se trataban, pero cuando estuvo suficientemente cerca, reconoció de traje al presidente, Miguel Archanco, junto al serbio Vasilijevic, el Director Deportivo y también a Peralta, el vicepresidente del conjunto navarro. Los otros dos se trataban del capitán, Patxi Puñal y del hasta ahora entrenador, Jose Luis Mendilibar.
Y por la expresión de cada uno, no parecía tener muy buena pinta.
Quizás era el último día que veía su querida escultura de piedra.

-Buenos dias, presidente.-Dijo, esquivando miradas y con tono seguro, pese que por dentro se sentía de cristal.-¿De que estan hablando?

Beovide

-Nada que le preocupe, Iglesias. Ya le avisamos que debíamos tener una charla hoy para preparar el inicio de una nueva temporada.-Dijo el presidente, en tono calmado pero imponente. Miguel Archanco se preparaba para su segunda campaña como Presidente del club, pero muchos aficionados ya criticaban el trabajo que estaba desempeñado en su nuevo puesto. Subida de precios, malas ventas de jugadores claves, y sobretodo, las cuentas del club, que indicaban muchas pérdidas, habían acabado con la paciencia del socio medio. Necesitaba un soplido de aire fresco, y por lo que había escuchado de la directiva, esperaba encontrarlo en un nuevo entrenador.

Por eso allí se encontraba el actual, José Luis Mendilibar, que pese haber dado grandes tardes de fútbol, era cada vez más criticado por su empeño de poner siempre el mismo once sin dar oportunidades a los jóvenes. Tampoco los resultados habían ayudado a que el aficionado le apoyara, derrotas importantes le marcaban, como aquel 8-0 frente el Barcelona o el 6-0 frente el Rayo Vallecano. Se había logrado la permanencia, pero ahora los rojillos querían algo más. Y eso planeaba darles el presidente.

Junto al entrenador y el presidente se encontraban tres hombres de igual importancia, Peralta, el vicepresidente tras la llegada de Archanco al mando, el serbio Vasilijevic, que ahora se encarga de la dirección deportiva y el eterno capitán, que pronto llegaría a los 40 años, Patxi Puñal.

Conocía a cada uno, Peralta y Vasilijevic eran simples marionetas de Archanco en búsqueda de asegurarse su puesto de trabajo cuando sus contratos terminasen. Con esos dos era imposible contraponer las decisiones de Archanco. Si algún día era presidente de Osasuna, Iglesias se prometió que la directiva la formaría gente que de verdad amara los colores, y no perros falderos sin criterio propio.

Por suerte con ellos estaba Patxi, un hombre que amaba los colores y que hablaba en nombre de todos los jugadores.

Felipe hablaba de parte de todos los trabajadores del club. Seis personas para decidir el futuro del club.

-Vamos a dentro para hablar.-Dijo el vicepresidente, y los demás asintieron. Una vez dentro de la sala, el presidente se sentó frente el capitán, en medio de sus hombres de confianza. Puñal tenía a la derecha al actual entrenador, mientras que Felipe estaba a su izquierda.

-¿Quieren algo de beber?-Invitó el serbio, con tono amigable.-tengo refrescos fríos, cerveza…

-No es necesario.-Informó el presidente.-Vamos a ser breves, como sabrán, debemos comenzar a planificar la nueva temporada, y el primer paso es el entrenador.-Dijo mirando a Mendilibar.-Desde la directiva creemos que has hecho un gran trabajo hasta ahora, tres años cumpliendo los objetivos y perdiendo a los mejores jugadores, y queremos felicitarte por todo tu…

-Me van ha echar,¿no?-Interrumpió Mendilibar, con la voz quebrada.

-Creemos que es hora de un cambio.-Dijo Peralta, apoyándose sobre la mesa.-Y tú no nos ofreces lo que buscamos.

-¿Qué es lo que buscais?-Mendilibar parecía estar apunto de estallar.

-Cantera, garra, huevos…¡Lo que la gente quiere!-Dijo entre risas Vasilijevic.-Pregúntale a cualquiera por la calle. Y tú ofreces defensa, resistencia, apoyos…Pero tú no les das a los jugadores la intensidad que necesitan. Deberías mirarte algunos videos de cuando estaba Aguirre, ese les daba a los jugadores una buena dosis de cojones.

-Siento interrumpir.-Informó el capitán.-Pero José Luis siempre ha llevado muy bien el tema de la motivación. Pone videos y nos dice que…

-Entonces el problema es que no sentís los colores.-Dijo desafiante Peralta.-Quizás deberíamos cambiar al capitán, que no sabe motivar a sus compañeros.

-Pues quizás deberíais.-Respondió Puñal.

-Calma.-El presidente frenó a aquellos dos hombres, tan diferentes entre si, uno representaba la codicia y el interés, el otro el amor por un club.-Que opinan los empleados del club, Iglesias?

-En casi su totalidad, apoyan a Mendilibar.- Había entrado en el juego, solo esperaba salir vivo de él.-Sin embargo, hay varias quejas, sobre todo del sector de ojeadores del club, ellos argumentan que el actual entrenador no aprovecha su trabajo, y se guía solamente por su criterio, por lo que consideran su trabajo inexistente.

-¡Es mentira!-Grito el entrenador.-Hago caso de sus informes, simplemente no me convencen…

El presidente sonrió.

-Creo que esto ya esta terminado. No tiene el apoyo ni de la directiva ni de los empleados, ni si quiera de la afición. Creo que la decisión esta clara.

Mendilibar giró la cabeza para mirar a Patxi, y luego a Felipe, pero al ver que ninguno hacía ningún gesto, se levantó y marchó.

Comprendía el enfado de Mendilibar, el ya estaba fuera antes de la reunión, y Archanco solo buscaba una excusa para hacerle perder los papeles y rematarle con alguna mentira a medias. Conociendo al presidente, su marcha sería antes de cerrar las oficinas del club.

-¿Entonces podemos marcharnos ya?-Dijo Puñal resignado, realmente el vestuario contaba con su entrenador, y Patxi había hecho todo lo posible para que José Luis se mantuviese en su puesto, pero para la directiva no cabía la posibilidad de renovar el contrato del mister.

-Usted sí, capitán, puede ir a entrar, pero usted no Iglesias.-Finalizó el vicepresidente.

Las palabras de Peralta hicieron tambalear las esperanzas de él de permanencia en el club, por un momento pensó que su trabajo finalizaba, y todo lo que aquello significaba.

-¿Necesitan de mi ayuda?-Dijo cuando el capitán rojillo salió hacía la verde hierba.

- Más que ayuda.-Rió Vasilijevic. Odiaba la risa del serbio.-Mendilibar no es el único que abandonará el club.- Un resquemor subió por la garganta del preparador, y por un momento, pensó que iba a devolver frente su presidente. <<Si me despiden, le dejo el regalo en la cara a Vasilijevic.>> El director deportivo siguió hablando.-Alfredo ya sabe que esta fuera del club, se lo hemos comunicado esta mañana.-Ahora entendía el rostro del segundo entrenador.-Posiblemente el nuevo técnico querrá traerse su mano derecha, no crees?

- Comprendo, pero…¿de que manera os puedo ser de ayuda?

- Has hecho un buen trabajo hasta ahora, eres la cabeza visible de todos los empleados, y por eso decidirás tú quienes seguirán y quienes sustituirán.-El presidente sonreía cada vez más.-Te enviaremos el presupuesto que tienes para mejor el Staff Técnico y los contratos de cada preparador, físio y ojeador. Estos serán tus deberes de verano.

-¿Pero eso no debería hacerlo el nuevo entrenador?

- No te mentiré, tenemos apalabradas cosas, pero la contratación de un mister aún esta lejana, y necesitamos al equipo terminado lo antes posible para el entrenador. Además, tu los conoces mejor que nadie.

Tras unas palabras más, Felipe salió por la misma puerta que minutos antes había entrado. Entró con la posibilidad de ser echado, y ahora era el quien decidía a quien echar.

Miró a cada uno de sus compañeros.

<<Lo siento, pero ha alguno le tendré que cortar la cabeza.>> Al menos Juani se llevaría una alegria.

Beovide