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agusduroo

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Todo lo publicado por agusduroo

  1. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    COMIENZO PROMETEDOR Fecha 2 vs Candeán (3-0)✔️ En la segunda jornada visitamos al Candeán y las cosas salieron de maravilla. Supimos dominar la posesión y llegar al arco rival durante todo el primer tiempo. Un gol anulado a Brais Gómez promediando los 30' significó que el marcador se abriese sobre el ocaso del primer tiempo con gol de Lázaro. Ya en la segunda parte, el partido se emparejó y debí mover piezas para mantener el control del partido. Los cambios dieron resultado ya que Aniceto Gago (DLC, 16 años, flamante incorporación en la delantera) anotó un golazo de tiro libre y Andrew Olivero empujó un centro de Lázaro, ambos ingresados unos minutos antes. Victoria y puntaje perfecto en las primeras dos fechas. Fecha 3 vs Alerta Navia (2-2)➖ Para la fecha 3, recibimos en O Carrasco a Alerta Navia. Tomé la decisión de reemplazar a los dos centrales ya que estaban cansados, por lo que Alberto (DFC, 16 años) y Jonathan Urrutia (DFC, 16 años) partieron de arranque. Nunca logramos dominar el partido y, si bien comenzamos ganando por 2-0 con tantos de Navarro y Olivero, la visita adelantó líneas y logró el empate con goles de Pallarés y Carballo. Sin embargo, el resultado pasaría a segundo plano por una expulsión infantil de Casciaro en el 84' (había ingresado hace solo 20 minutos). Este suceso, causaría ciertos problemas en el grupo al día siguiente. TURBULENCIAS La expulsión de Casciaro me sentó mal debido a que la misma se debió a una patada de calentura que Emilio propinó tras recibir un caño. En el entrenamiento del día siguiente, le hice saber mi postura al jugador que, lejos de reconocer su error, comenzó a recriminar cosas sobre su tiempo de juego delante de todo el vestuario. La discusión fue subiendo de tono hasta que Emilio soltó la frase que detonó mi hartazgo: "Este club necesita un DT de verdad". - "¿Están de acuerdo con esa afirmación?", pregunté al plantel en voz alta. - "Así es, este club necesita un DT de verdad, y tú demostrarás que lo eres, míster", respondió Óscar Aldrey. La gran mayoría del vestuario lo siguió, apoyándome y depositando su confianza en mí. - "Pues entonces, será mejor que regrese a casa, tengo mejores cosas que hacer que ser suplente en este equipito", exclamó Casciaro y abandonó el entrenamiento, seguido de Andrew Olivero y Michael Felice, los otros gibraltareños del plantel. Sin embargo, uno de ellos, el más joven, se quedó junto al resto del plantel: Daniel Seguí, el 3 titular, hijastro de Michael. - "Míster, yo creo en el proyecto y me gustaría seguir, si usted me lo permite". Puse una mano en su hombro, y lo miré a los ojos. - "Cuento contigo. Ahora, a entrenar". Los jugadores se alistaron rápidamente y salieron al campo de entrenamiento. El traspié que acababa de ocurrir no podía repetirse, había que manejar mejor al grupo y estaba dispuesto a aprender de lo ocurrido.
  2. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    @ruben88fisio Jajaja gracias por el aguante, es todo ficción pero me gusta adentrarme en la historia 😝 Los espero a vos y a @ansodi en los asientos preferenciales 😌
  3. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    EL PITIDO INICIAL En medio de los murmullos, escucho el pitido inicial del árbitro que señala el comienzo de mi primer partido oficial. Marcón Atlético vs Goián C.F., el partido que marcará el inicio de mi aventura. Para este encuentro, no hay sorpresas. Intentaremos plamar lo que hicimos durante la semana: una 4-3-1-2 con Sánchez al arco, linea de 4 con Pedro, Aldrey, Vázquez y Segui, Fernandes más retrasado para dar salida al equipo y aportar en la marca, Pereira y Camões de interiores y Lázaro de nexo entre el mediocampo y una doble punta formada por Navarro y Gómez. El 11 de gala. La tensión en la grada duró solamente 9 minutos, que fue lo que tardó Camões en anotar el 1-0 con un misil a distancia con destino al ángulo. La euforia se adueñó de todo el banco de suplentes. Y no tardó mucho en aparecer otra vez. Y otra vez. Y otra vez. Para el minuto 30 un tiro colocado de Navarro, una buena definición de Brais Gómez tras pase filtrado de Camões y un golazo de tiro libre de Tomi Vázquez nos ponían en ventaja por 4-0. El descuento de Barquero a los 37 nos hizo estar alertas, pero Gómez reafirmó el dominio total del Marcón cerrando el primer tiempo con una linda definición para el 5-1 parcial. En el complemento Uxío, Felice, Sousa, Casciaro y Olivero vieron minutos, el último participando en el 6-1 habilitando a Camões, que definió el mano a mano con mucha calma. El panorama cambió muchísimo entre los aficionados y los murmullos se convirtieron en aliento, risas y cánticos. Parecían muy conformes con el futbol de posesión que desplegamos y, particularmente, con la actuación del portugués Camões, que dio una clase de balompié. Finalmente, los 3 puntos se quedaron en casa y empezamos el torneo de la mejor forma posible. Ahora, a pensar en lo que se viene...
  4. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    @ansodi Hay que recriminarle al presi Ramón que está teniendo pretensiones "poco realistas" 🙃
  5. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    @dankerlot por 74 pavos anuales tenés un asiento reservado con tu nombre al lado del campo para ver a Camões tirando lujos bien de cerca. Pero si preferís disfrutar de la Duroneta tomándote unas cervecitas, la cantina del club también tiene una buena vista al campo y de seguro te encuentres a los preparadores físicos echándose unos tragos también 😂 Bienvenido a la aventura!!
  6. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    CUERPO TÉCNICO El lunes por la tarde me presenté en el campo de entrenamiento, una cancha a unos metros del campo del equipo. Este era bastante lindo. Se llamaba "O Carrasco" y contaba con unas gradas pequeñas pero bien cuidadas. La cancha de entrenamiento era usada por el equipo y también alquilada para un torneo informal en el que jóvenes (y no tan jóvenes) competían los domingos por un barril de vino gallego que se entregaba al ganador a fin del curso. El plantel me recibió de maravilla y realizamos el primer entrenamiento (muy liviano, por ser el primer día). Empecé a notar falencias desde ese momento. Los muchachos eran muy voluntariosos y predispuestos, pero en cuanto a calidad futbolística, podemos decir que eran muy voluntariosos y predispuestos... Debíamos reforzar el equipo. Pero para eso, primero tenía que formar mi cuerpo técnico. Debía encontrar algunos otros locos que estuvieran dispuestos a ponerse al frente de este equipo de cabras: un ojeador, un ayudante de campo y un preparador. Lo más sencillo fue convencer a Mohamed para ser mi ayudante de campo, mi mano derecha en esta aventura. Mohamed Ochoa es un tipo muy habilidoso para cualquier tipo de reparación, y es a quien acudo cada vez que algo falla en el hotel. Por eso, es muy común verlo deambulando por los pasillos del mismo, así como también cenando en casa con mi familia. A sus 31 años, vive de las distintas changas para las que lo contratan los vecinos del municipio y un semi-sueldo de 400 euros al mes, era para él un ingreso muy valioso. Además, Mohamed era un loco por el balompié, que disfrutaba de pasar horas y horas mirando partidos, sobre los que acostumbrábamos a discutir y opinar en las sobremesas. Estaba seguro de que me sería de ayuda. Para el puesto de preparador físico, logré convencer de subirse al barco del Marcón Atlético a Ferrán Fontanils y Pedro Luis Quintana, un duo muy particular pero con buenas intenciones. A sus 26 y 31 años, Ferrán y Pedro se dedican a cuidar el ganado ovino de la estancia del Sr. Mayoral, un adinerado que dispone de un campo al que presta bastante poca atención. Ellos dos son quienes mantienen la estancia en pie y, debido al esfuerzo físico que eso demanda, entrenan con regularidad para mantenerse en forma. Si bien chocan bastante, saben cómo ponerse de acuerdo y con eso me basta. Por último, precisaba alguien con mucho mundo y recorrido para funcionar como ojeador. Debía ser alguien que no tenga problemas en viajar a menudo y pasar periodos de tiempo lejos de casa. Y quién mejor para eso que el único guía turístico del municipio, Pedro Román, o "Chucho" para los amigos. Con él tenemos un acuerdo para que acerque a sus clientes al hotel a cambio de una comisión por huesped ingresado. Su tarea sería la de dedicar algunas horas extras de su vida a presenciar partidos de posibles fichajes, así como mantener contacto con ellos y mostrarles el lado feliz de Marcón para que se animen a sumarse al proyecto. De esta manera, el proyecto empezaba a tomar forma. La era Duro en el Marcón Atletico no hacía más que comenzar... PLANTEL Si creen que conseguir un cuerpo técnico fue difícil, no tienen ni idea de la odisea que significó para nosotros armar un plantel competitivo que pueda apuntar al ascenso a Preferente Galicia (6ta división del futbol español). En nuestra primera reunión de cuerpo técnico, tuvimos la brillante idea de acercarnos a observar los partidos del torneo informal que se disputaba los domingos en nuestra cancha de entrenamiento. Allí descubrimos a varios jóvenes que, a juzgar por lo poco que vimos, parecen prometedores. Pablo (POR, 15 años), Javier Navarro (DLC, 16 años), Tiago Fernandes (MED, 19 años, portugués), Tomás Vázquez (MC, 16 años), Pedro (DFD, 16 años) y Thiago Sanchez (POR, 16 años) son los que hemos seleccionado para el primer equipo, mientras que reclutamos a unos cuantos para que entrenen en el equipo sub-19 y poder evaluarlos con más tiempo. También colocamos anuncios de que estábamos buscando jugadores para el primer equipo en el Instagram del club. Por ese medio, conocimos a Óscar Aldrey (DFD, 20 años), Francisco Camões y André Pereira (dos amigos portugueses de 21 y 20 años, ambos MEC, que buscaban un club para jugar juntos), Nacho Lázaro (MPC, 23 años), Brais Gómez (DLC, 21 años) y João Sousa (MPD, 21 años, portugués), los seleccionados entre no muchos más postulantes. Como bonus, Chucho se contactó con una familia de gibraltareños que hacía algunos años ya vivían en un pueblo cerca de Marcón. Michael Felice (el mayor de todos, MEC, 45 años, lo contratamos también como jefe de desarrollo de juveniles), Daniel Seguí (DFI, 21 años, hijastro de Michael) y Andrew Olivero (DLC, 30 años) y Eric Casciaro (MEC, 26 años) primos de Daniel. Entre los 4, junto a sus mujeres, se hacían cargo de un restaurante bastante reconocido en la zona y aceptaron sumarse a los entrenamientos (bastante a disgusto de la parcialidad femenina). Nos faltaba un líder en el vestuario que conozca Marcón y que se asegure de que todo funcione como debe ser, por lo que con mucho esfuerzo convencimos de sumarse al proyecto a Uxío (DFI, 41 años), dueño de la ferretería del pueblo y, de ahora en más, nuestro capitán. Esos serán nuestros jugadores, los guerreros que defenderán la camiseta del Marcón, a menos que necesitemos fichar a alguien más ante algún imprevisto. Se lo ganaron por su lealtad y por su rendimiento en amistosos contra equipos de nivel similar en la zona, que fue bastante bueno, cerrando 3 victorias (todas por 2-0), 1 empate sin goles y 2 derrotas (1-2 y 0-1). Sin embargo, el verdadero desafío comenzaba ahora.
  7. agusduroo ha respondido a agusduroo en un post in a topic de Historias
    ESTA ES MI HISTORIA Mi nombre es Agustín Duro. Nací un 14 de julio de 1982 en la Ciudad de Buenos Aires en el seno de una familia de clase media. Mis cuatro abuelos eran españoles, por lo que siempre quise conocer ese país. Desde chico siempre fui apasionado hincha de Boca Juniors y del Celta de Vigo (club del que era fanático mi abuelo paterno). Como hincha de Boca, me tocó vivir más alegrías que desilusiones, como hincha del Celta, bueno, de todo un poco, ¿verdad? Estudié Turismo y Hotelería en mi país y a los 30 años, es decir en 2012, se me presentó la oportunidad de emigrar a España: resultó ser que mi abuelo poseía unas tierras en Pontevedra de las que nadie de la familia estaba al tanto y yo tuve la ambiciosa visión de construir allí un hotel. Así fue que partí con mi esposa, Julieta, y me asenté en Marcón, un municipio de Pontevedra muy rural con no mas de 2500 habitantes y no muchas cosas para hacer. Yo dirigía el hotel, aunque Julieta era quien más tiempo pasaba en él y, como siempre me interesó el mundo de la gastronomía, yo era el encargado de atender la humilde taberna que funcionaba tanto para los huéspedes del hotel como para clientes externos. LA NOCHE QUE CAMBIÓ TODO Hace tan solo dos meses, una noche muy tranquila en la taberna, estaba levantando las sillas para cerrar cuando alguien tocó la puerta. Corrí la cortina que cubría el vidrio y vi a un hombre de unos 60 años con cierta cara de preocupación. Abrí la puerta. - "Estamos cerrando", dije. - "¿Podría servirme un orujo mientras levanta las sillas?", preguntó con la voz cansada el hombre. A regañadientes, accedí. Tenía ganas de volver a mi casa pero lo cierto es que la clientela en Marcón no abundaba y cualquier entrada ayudaba a llegar a fin de mes. Le serví el trago que me pidió y comencé a ordenar un poco el salón, mientras en la tele pasaban el resumen de la temporada del Deportivo La Coruña. - "Cómo se nos ha escapado el ascenso, joder", murmuró el hombre. - "La verdad que sí, tendrán que esperar al menos dos años para volver a jugar el clásico gallego", respondí con una leve sonrisa burlona. A mis espaldas, una camiseta enmarcada del Celta que había sido firmada por Iago Aspas. - "Bueno, cuando vosotros ganéis una liga, me avisas, ¿vale?", dijo el hombre y se rió. "Me llamo Ramón, por cierto". - "Agustín", respondí yo. "¿Qué te trae tan preocupado para venir a tomar a estas horas un domingo?". - "Verás, soy presidente del club del municipio y el entrenador del primer equipo acaba de llamarme para presentar su renuncia. El tío me ha dicho que su madre está mal de salud y se ha vuelto a Cádiz a cuidarla, ya que consiguió trabajo para él y su cuerpo técnico en un club amateur de por allí. Comprendo la situación pero, ¿quién en su sano juicio se atrevería a pararse al frente del equipo luego de una campaña tan desastrosa?". - "Esas son malas noticias", dije mientras pensaba en lo que me contaba Ramón. "Pues la casa invita otra ronda para pasar el mal trago". Así estuvimos charlando de futbol como por una hora. Yo le expliqué cómo creía que debía jugar el Celta y las claves para que se meta a alguna competencia europea. También debatimos sobre si el Depor se podrá recuperar en un futuro cercano. Finalmente, tras una larga charla de futbol y, quizás con un par de copas de más encima, Ramón soltó la pregunta que cambiaría todo: "¿No te animarías a tomar el mando del primer equipo? Sé que varios de los muchachos vienen aquí los viernes a divertirse y algunos de ellos ya deben conocerte. Creo que con un par de refuerzos, el equipo podría llegar a responder con entusiasmo ante una cara nueva. Además veo que te interesas bastante por entender de fútbol". En ese instante, pasaron por mi mente miles de recuerdos. Los sábados por la mañana jugando en Club La Paternal en mi Buenos Aires natal, las tardes de sol pateando la pelota con mi abuelo José, los goles de Boca gritados eufóricamente con mi padre y mi sueño de joven de hacerme un nombre en el mundo del futbol. - "No sé, Ramón. Yo tengo el hotel, la taberna, mi mujer, mis hijos. Además jamás dirigí un plantel, sería una experiencia totalmente nueva". Con dificultad, Ramón se levantó de la silla y me dijo: "Te espero mañana por la tarde en el campo, estoy seguro de que tomarás la decisión correcta". Caminó hacia la puerta, levantó su mano a modo de saludo y se fue. Sin pagar, el muy cabrón. Cerré la taberna, volví a mi casa y tras debatirlo por largo rato con Julieta y con mis hijos, la decisión estaba tomada: ese mismo lunes, comenzaría mi experiencia como entrenador de fútbol.
  8. agusduroo añadió un post del hilo en Historias
    04 de Septiembre de 2021 | Pontevedra, Galicia, España Son las 7 de la tarde y estoy cruzando la puerta del vestuario rumbo a mi primer partido al mando del equipo. Las luces de los reflectores (o al menos las que aún funcionan) golpean mi rostro, mientras mis muchachos entran al campo al trote unos metros adelante de mí. Oigo los murmullos de la grada al verme acomodándome en el banquillo. "Este tío no tiene ni idea de qué hace aquí" alcanzo a escuchar que uno dice. Me acomodo el cuello de la camisa y me siento en mi lugar. A mi derecha, mi amigo y ahora ayudante de campo, Mohamed. A mi izquierda, el entrenador rival que me mira con ciertos aires de superioridad. Delante mío, mi oportunidad de adentrarme en ese mundo que tanto admiraba de adolescente, el mundo del futbol. Antes de que comience el encuentro, agarro una botella de la heladerita conservadora y tomo un trago de agua mientras cierro los ojos. Pienso, ¿cómo llegué hasta acá? Muy bien, esta es mi historia...