Yo no lo hago, de esa manera se parece más a la vida real, donde no se puede repetir un partido porque al presidente de un club no le guste el resultado. En mi partida se me van alejando los objetivos y ya peligra mi puesto, pero así es más realista y lo disfruto más. Cuando cierro la partida, sigo dándole vueltas a cómo darle la vuelta a la situación.